Deportes

Tenemos nuevo Rey. Real Madrid pudo por fin ganarle al Barcelona en la presente temporada, y lo hizo nada menos que en una final. Sin Cristiano Ronaldo, los merengues demostraron en Mestalla que están más vivos que nunca y se quedaron con la Copa del Rey. Ésta tarde el ‘Hala Madrid’, se terminó escuchando más fuerte que el ‘Visca Barca’. Algunos dicen que por fin Real Madrid encontró al técnico. Carlo Ancelotti ha sabido llegar en el vestuario merengue. El italiano, a inicios de temporada dejó ir a Mesut Ozil, y se empezaba a ganar críticos. Hoy en día, el italiano responde con resultados. En esta oportunidad, sin Cristiano Ronaldo comandando el ataque madridista, Gareth Bale fue el protagonista de lujo, el que se robó todas las miradas. El galés terminó siendo decisivo en un partido que puede llegar a ser un envión anímico de cara a la recta final de la temporada. El resultado fue de 2-1 a favor del Real Madrid. Lionel Messi, una vez más, pasó inadvertido y sigue alimentando los rumores de que se estaría cuidando para el Mundial. El ‘Tata’ Martino perdió en la pizarra ante ‘Carletto’, y no supo cómo contrarrestar la propuesta del italiano. El ex PSG apeló a lo que le había funcionado al Atlético de Madrid y al Granada en la última semana. La fórmula resultó una vez más. Hacía once años que el Barcelona no perdía tres partidos seguidos, lo que nos habla de una evidente crisis en el club catalán. A la sanción de la FIFA, la eliminación de la Champions, la supuesta mala relación que llevarían los referentes en el vestuario y el bajísimo nivel de Lionel Messi, ahora se le suma la final perdida en la Copa del Rey. Se vienen tiempos difíciles para el equipo culé, y dependerá de ellos salir de esta mala situación. El Real Madrid vive una realidad totalmente distinta. El conjunto capitalino sigue vivo en La Liga, jugará semifinales de Champions League y acaba de ganar la Copa del Rey. Esto es lo lindo del fútbol, luego de perder el clásico por La Liga, se hablaba de crisis en el equipo de Ancelotti, una crisis que supieron darle vuelta, y que les permite dibujar una sonrisa el día de hoy.